Eficacia socio-comunitaria

Pasar de la responsabilidad social a la eficacia socio-comunitaria

La performance revela nuestras proezas innovadoras, pequeñas o grande, pero exitosas. La eficiencia testimonia que hemos optimizado la utilización de nuestros recursos. La eficacia significa que hemos alcanzado nuestros objetivos. El resultado es la consecuencia (medida o no) de nuestros actos. La ética ya no es más el resultado de meras “buenas intenciones”, sino de acciones. ¿Sirve entonces medir nuestros resultados, mostrar nuestras performances o probar la eficacia de estas últimas? Aquello que aportamos a la sociedad civil es mucho más interesante que aquello que realizamos. ¿Cuál es nuestra participación en el mantenimiento o restablecimiento del bien común? Y sobre todo, ¿Qué innovación podemos compartir con la comunidad económica de modo tal que nuestra experiencia exitosa sea útil a la mayor cantidad posible de personas?

Evaluar nuestro verdadero valor

Nuestro valor depende de los esfuerzos proporcionados: aquello que es fácil para algunos, es difícil para otros. ¿Acaso esta evaluación tiene que ser hecha por nosotros mismos y/o por otros? Si solicitamos a nuestras partes interesadas que nos evalúen, ¿acaso no es más esclarecedor que si realizamos una auto-evaluación? Las partes interesadas nos evalúan sobre la base de nuestras auto-evaluaciones, con el objetivo de encontrar puntos a mejorar y tener una mejor visión sobre los resultados reales. Nosotros publicaremos su visión en nuestro “balance de sostenibilidad” o reporte RSE. Los nuevos criterios de evaluación se sitúan esencialmente en la calidad de nuestras relaciones. De nuestras capacidad y apertura hacia la inteligencia colaborativa nace nuestra capacidad de innovación y de desempeño, porque solos no podemos realmente actuar.Ce qui est difficile pour certains est plus facile pour d’autres : le niveau de difficultés est fonction des potentiels. Il nous faut mesurer le niveau de nos efforts pour atteindre la performance.