Relaciones
Acompañar es compartir el pan
El significado etimológico de “acompañar” es justamente compartir el pan. Para acompañar, estamos “con” y no “contra” nuestros clientes: trabajamos en inteligencia colaborativa y conjugamos los intereses personales del Comercial, los intereses de la empresa y los intereses del Cliente. Porque el interés de la empresa pasa por una justa comercialización: un Cliente disconforme puede arruinar nuestra reputación.
La gran innovación
La venta comienza el dÃa en que el producto es comprado: esto cambia todo, no sólo en cuanto a la fabricación, sino también en nuestras relaciones. Antes, durante y después de la compra, es necesaria una actitud de cercanÃa: escuchar más que hablar, respetar a los Clientes, aportar soluciones más que vender, utilizar la pedagogÃa para vender los nuevos valores agregados y la utilización diferente del producto, ampliar el campo de intercambios, respetar la confidencialidad, escucharlos para comprender sus necesidades frente a nuestra competencia.
Pregunta clave
¿Cómo llevar a cabo la organización necesaria para formar a nuestros Comerciales en este “modo relacional”?